RAID LES DUNES 2017

Día 1 Marrakech

Recogida en el aeropuerto y acompañamiento al Hotel desde el que se inicia una excursión por la medina de Marrakech que permite disfrutar de una primera y excitante toma de contacto con el Marruecos más intenso.

Día 2 Marrakech – Ouarzazate

Se emprende la marcha hacia las montañas del Atlas a través del puerto de Tizi n`Tichka, el paso de montaña más alto del Norte de África y ruta asfaltada que serpentea en mil curvas hasta superar la cordillera. A medida que se desciende hacia las puertas del desierto, el aire se hace cálido y comienza el valle de las mil kasbahs en Ouarzazate.

Ouarzazate, tradicionalmente conocida como la puerta del desierto, está enclavada en el lugar donde se unen los ríos Draa y Dades y su arquitectura anticipa lo peculiar de la vida nómada más allá de los oasis, en el Sáhara.

Día 3 Valle de las mil kasbahs

La ruta desde Ouarzazat hasta el este de Tineghir y las Gargantas de Todra es espectacular, con cientos de kasbahs fortificadas que los bereberes levantaron para dependerse de bandidos e invasores, entre acantilados de color terracota y rojo, palmerales y jardines verdes, arroyos serpenteantes y cañones esculpidos por la erosión del agua.

Una explosión de colores y sensaciones que proporcionan mil y una excusa para inmortalizarse en el recuerdo o en fotografías. Desde Skoura y siguiendo el curso del valle se alcanza el cañón del Todra, con sus paredes de roca que alcanzan los 300 metros en sus partes más estrechas.

Día 4 Tineghir – Merzouga

A medida que quedan atrás los palmerales verdes y rocas rojas se abre la ruta hacia el desierto del Sahara en planicies infinitas que alcanzan el horizonte hasta el Erg de Merzouga, perla del desierto y digno ejemplo del desierto soñado: dunas de arena roja que se extiende con elegancia y quietud y que cambian de color al capricho del sol.

Día 5 Merzouga – Erg Tafraute

A través de pistas de arena y fiz-fiz que se convierte en barro en cuanto lluevo la ruta atraviesa wadis, fondos salados de lagos hoy secos y zonas de dunas de arena roja. Se alargan las sombras en algunas de las pistas del clásico Paris Dakar, un espacio único entre acantilados de roca y el desierto que se extiende infinito hacia el Sur, el lugar es de una emocionante belleza.

Día 6 Erg Tafraute – Nesrat – Zagora

Las antiguas caravanas procedentes de Tombuctú, después de más de 50 días de marcha por el desolado desierto del Sahara, alcanzaban el oasis de Zagora y el frescor de los palmerales. Un sueño convertido en realidad. Esta sensación se percibe desde la entrada al palmeral: los sonidos procedentes del murmullo del agua entre las piedras del río, del viento sobre las ramas hacen de este lugar un escenario único para soñar.

La llegada a Zagora desde del desierto hace que se aprecie en su exacta medida la sensación de alivio con que realizaban esa misma ruta las caravanas procedentes de Tombuctú.

Día 7 Zagora – Erg Chegaga

Al más puro estilo aventurero, junto al fuego y entre las dunas de Erg Chegaga la expedición acampará al estilo bereber. Bivouac de lujo bajo un cielo lleno de estrellas en una espectacular noche con “haimas”, tiendas como las que utilizan los nómadas del desierto, para observar los cálidos colores de la puesta del sol y el amanecer entre las dunas. Una experiencia  inolvidable  en  los mismos  escenarios  mágicos  en   los   que  las  caravanas milenarias emergían del desierto en su ruta hacia las medinas y ciudades imperiales marroquíes.

La experiencia de compartir una cena a la luz de velas y candiles, la ceremonia del thé marroquí, acompañada de la música berebé y la brisa del desierto despierta los sentidos y traslada al viajero al más auténtico ambiente de los grandes caravanas y expediciones a través del desierto del Sahara.

Un sueño hecho realidad para cualquiera y un recuerdo único que queda para siempre en el recuerdo.

Día 8 Erg Chegaga – Ait Ben Hadu

Regreso al Valle de las mil Kasbahs y sus callejuelas de barro, torres fortificadas y palmerales. El recorrido entre joyas desconocidas y tesoros de la arquitectura del barro desarrollada en esta frontera entre el desierto del Sahara y las montañas del Atlas descubren tesoros únicos. Hospedaje en Ait Ben Hadu, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y escenario de películas como Lawrence de Arabia, El cielo protector, Gladiator o Babel.

Un escenario de cine para sonar a la luz de las estrellas.

Día 9 Ait Ben Hadu - Marrakech

Regreso a Marrakech a través de la cordillera del Atlas. En la histórica Medina de la capital imperial de Marruecos se vive el bullicio de los mercados, la Yamaa  el Fna con sus encantadores de serpientes y sus puestos callejeros a los pies de la mezquita de Kutubia y a unos metros del Place des Ferblantiers.

Hospedaje en un Riad, hotel al estilo de una casa tradicional Árabe, un mundo interior construido alrededor de un patio central con árboles frutales y una fuente. La estancia en un Riad ofrece una particular visión al mundo de Las Mil y Una Noches, con todas las comodidades y el lujo de un hotel moderno. Refinada elegancia y estilo en Marrakech.

Día 10 Marrakech

Marrakech, sus callejuelas y su incesante actividad diaria es el lugar perfecto para apurar el exotismo de Marruecos. El perfecto lugar para despedir como se merece un viaje de leyenda.